Doma racional

Durante mucho tiempo prevaleció en la Argentina el tipo de doma tradicional. Los gauchos sometían a los caballos a un proceso brusco de domesticación mediante el cual lo “quebraban”. Afortunadamente hoy en día la tendencia se redirigió hacia la famosa doma racional o india. Al contrario del otro, este método busca conocer al caballo y entender su comportamiento para poder así hacerse amigo, ganar su confianza y poder trabajar juntos. Con esa base fundamental, los entrenadores se dieron cuenta que uno logra obtener mejores resultados que con la doma tradicional.

El caballo es un animal de presa por naturaleza, su instinto es correr ante las amenazas. La doma racional lo entiende como tal y por eso busca principalmente demostrarle que el hombre no representa un peligro para ellos. Una vez que el caballo deja de vernos como posible depredador y más bien como un amigo se da comienzo a esta increíble relación. Así, pacífica y respetuosamente, se le va pidiendo al caballo y éste, a cambio, responde amablemente.

Cada caballo es un mundo y si bien las bases son las mismas para todos el buen domador es aquel que sabe leer a cada uno de ellos, distinguiendo sus fortalezas y debilidades, aquel que sabe hacerse caballo él mismo para comunicarse con ellos, aquel que logra conectarse de una manera tal que logra formar un binomio con cada uno. La doma racional más que trabajar al caballo es trabajar la propia mente para desprenderse de todo y lograr una conexión plena y pura con este honorable animal.